Muchas empresas promulgan trabajar por la transformación digital del país, pero al interior siguen más preocupadas por “la hora nalga” de sus empleados, o peor aún por aquellos que no las cumplen y resultan sancionados teniendo que compensar las horas restantes en fin de semana. Lo anterior dista mucho de lo que la verdadera transformación digital busca: ser un sistema organizado y objetivo, enfocado en la mejora del rendimiento de los equipos de trabajo utilizando herramientas digitales para tener mejores resultados.
Lograr una verdadera transformación digital dentro de tu organización es posible, pero es importante considerar los puntos básicos para lograrlo.
Infórmate e informa a tu entorno sobre transformación digital
Empieza por explicar qué es la transformación digital. En su significado literal es la reinvención de una empresa cuando usa realmente tecnologías digitales para mejorar el rendimiento de sus equipos de trabajo, y esto a su vez lo perciben sus clientes. Una forma de llevarlo a cabo es cuando comienzas a convertir procesos manuales en digitales. Por lo general los empresarios apropian ciertas tecnologías selectivamente mientras persisten procesos manuales: esta solución ya no alcanza. La transformación debe apuntar a que esos procesos sean cada vez más eficientes, y ello implica muchas veces reemplazar completamente procesos manuales por automatizados con tecnología o invertir en mejores equipos que procesen esa tarea.
Crea y apoya una cultura digital
La transformación digital tiene un gap entre la creación de la tecnología, su uso y apropiación. Lo que nos lleva a pensar el paso B de este artículo, la cultura digital. De nada sirve, pensar que podemos implementar la tecnología cuando la cultura empresarial no se adapta a las generaciones más jóvenes. Muchos de los grandes pensadores han logrado entender que la mezcla de personal mayor (refiriéndome a la edad) y los jóvenes nativos en la era digital hacen mejor forma de hacer negocios estando juntos. En mis términos, me gusta hablar de los green head y los grey head. Al operar una empresa de esta forma, incorporas innovación mientras cuidas su estructura y base.
¡Ponte en marcha con la Transformación digital!
Nuestro paso C, es: ¡ponte en marcha! y aquí te dejo unos ejemplos. Una forma concreta de hacerlo, por ejemplo, es eliminando reuniones eternas de trabajo en salas de juntas. Más bien busca crear salas de trabajo en aplicaciones digitales de trabajo como Slack. Deja de seguir poniendo sellos de caucho con esa tinta negro-azulada al recibir facturas, busca una app que las digitalice y las envíen a tu correo electrónico. Y cuando las recibes, ¡resiste la tentación de imprimirlas! Cuida al medio ambiente y la oficina guardándolas en carpetas en Cloud.
Muchos a tu alrededor tendrán cara de pánico y dirán: ¿qué es eso? O te darán argumentos como: “nosotros no somos una empresa de tecnología, eso no es necesario”. Pero la verdad es que si lo es. Muchas de las grandes organizaciones como el BID, han hecho grandes inversiones para conectar los continentes con cables submarinos y los gobiernos hacen maratónicos esfuerzos porque las personas entren a la era digital, y realmente las empresas son las únicas que pueden lograr que los diversos sectores productivos de los países salten ese gap.
¿Cómo empiezo la transformación digital en mi empresa?
Ahora bien, las diversas empresas en todos los sectores deben dar un primer paso y es con educación, formando eficientemente a sus equipos de trabajo en los temas base de la cultura digital. Es la única forma de implementar la transformación digital que tu empresa necesita. No sirve de mucho grandes inversiones en software, aplicaciones móviles, manejo de grandes cantidades de datos o hablar de robotizar ciertos procesos, cuando las personas que lo deben trabajar en su día a día no están actualizados.
Recuperado de: Platzi
